Por Ana Ivelisse
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| Photo by Fleur Kaan on Unsplash |
Esta era la pieza perdida de nuestra rutina de belleza,
pero que ya hoy día encontramos y no volveremos a quitarle la vista de encima.
La verdad hay que decirla, llego a nosotros a través de
las redes sociales, específicamente Instagram, y desde entonces cada día crecen
sus seguidores y nos dejan saber lo beneficioso que realmente es.
En un artículo anterior te hable sobre el rodillo de jade, y como resulta de beneficioso. Pues ahora te vengo a presentar a su amigo
el Gua Sha.
El Gua Sha viene de China, teniendo su origen en la
medicina tradicional. Se le atribuye que tiene más de dos mil años Se puede
traducir como raspar. Es una técnica que se usa para el cuidado de una piel más
firme.
Es una piedra, que puede ser de cuarzo, jade, etc.,
suave, plana y de tamaño mediano, que se aplica en la piel del rostro a modo de
masaje, ayudando así a liberar toxinas, activando la circulación. Ayuda a
difuminar las primeras arrugas superficiales, por eso ha de ser un aliado en la
rutina diaria.
¿Cuándo se usa?
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| Photo by Cherrydeck on Unsplash |
Lo ideal es que sea por las noches, luego de lavar tu
rostro, y tras aplicar algún sérum o aceite facial.
Sus beneficios aumentaran si lo combinamos con el
rodillo de jade, ya que ambos tratan la piel, pero de maneras distintas. El Gua
Sha tiene un efecto lifting (planchado de la piel), reafirmando la piel y la
musculatura, y tiene cualidades preventivas a largo plazo; mientras el rodillo alisa
la piel, activa la circulación y genera que esta se caliente, ayudando así a
que la sangre del rostro circule aún más rápido.
Como usarlo
Ten siempre presente que los movimientos serán hacia
arriba.
La parte alargada es el lateral, mientras que los dos
bordes que tiene (lo que parece la parte de arriba de un corazón de dibujo) es la
esquina.
Desde donde termina el cuello realizaras el raspado
hacia arriba, hasta llegar a la cabeza. En la mandíbula realiza movimientos de
dentro hacia fuera, hasta llegar a las orejas. En las mejillas, debe ser suave y
se lleva a hasta la sien. Con los bordes pásala por la frente también con
movimiento ascendente.
Lo importante es ser constante. Cada noche
religiosamente aplicar los masajes, con tu rostro limpio e hidratado. Recuerda
no ser muy áspera al hacerlo, pero tampoco muy superficial.
Cuéntame si lo usas, si te gusta, o si después de leer
este articulo piensas en adquirir uno.
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